Rompe el silencio

Amador Mohedano se pronuncia sobre las acusaciones de Rocío Carrasco: “su madre lo decidió”

Hay dos versiones de un mismo hecho que se contrastan completamente.
miércoles, 7 de abril de 2021 · 10:18

Amador Mohedano se ha pronunciado rotundamente sobre las declaraciones impartidas por Rocío Carrasco en el último capítulo del documental que protagoniza. Pues la hija de la más grande se ha levantado contra su propio tío y este no ha tardado en reaccionar.

Según Rocío Carrasco, cuando ella y su reciente novio sufrieron el atroz accidente que por poco se cobra su vida, Amador Mohedano cambió la cerradura de casa en donde ella vivía y dejó desamparado por completo a Fidel.

Albiac tenía pase libre a la casa, pero, al cambiarse la cerradura, perdió todo tipo de acceso mientras que Rocío Carrasco luchaba por su vida. Supuestamente el autor de esa aberración fue Amador Mohedano y, efectivamente, está comprobado que así fue. Pero aparentemente hay dos versiones de un mismo hecho que se contrastan entre sí.

Rocío Carrasco no se habla con su tío, está enemistada al igual que con toda su familia. No confía en nadie y, hasta ahora, parece que tiene motivos suficientes para no hacerlo. Pero a juzgar por las palabras dichas por Amador, es evidente que entre ellos queda, como mínimo, una conversación pendiente.

Lo único que he hecho en el tema de mi sobrina es lo que mi hermana me ordenaba que hiciera.

Esto comentó Amador Mohedano en “El programa de Ana Rosa”. Se ve que los hechos no han sido del todo interpretados por Rocío Carrasco o bien ha querido interpretar lo a que ella le parecía conveniente. Sin ir más lejos, el tío de Rociíto confiesa:

Faltaron cosas de la casa de La Moraleja y se desconfiaba de Antonio David y del jardinero, que tenía llaves, y Rocío Jurado decide cambiar la cerradura porque no se fiaba de nadie. Rociíto estaba en coma, dormida, y su madre lo decidió.

Evidentemente hay dos versiones de un mismo episodio que, a entender por las circunstancias, fueron interpretados de dos formas completamente opuestas. Es obvio que allí se deben una charla familiar para aclarar qué fue lo que pasó, qué gestos lastimaron y cómo se puede reparar el daño. Eso sí, si ambos quieren.

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