Jimmy Giménez Arnau confirma la noticia sobre Pedro Carrasco que Raquel Mosquera no quería escuchar

A pesar de que Raquel Mosquera (53 años) vive un buen momento tras el anuncio de su tercera boda con el nigeriano Isi, las cosas no andan de lo mejor. El pasado 27 de enero se cumplieron 22 años del fallecimiento de Pedro Carrasco y el periodista Jimmy Giménez Arnau (78 años) decidió atacarla con la frase que la viuda nunca aceptó, porque ella vivió algo diferente.

El comunicador se fue con todo y lanzó una verborrea para herir a la peluquera. “Lo que cuente esa señora sobre Pedro Carrasco me trae sin cuidado. Él se portó con ella muy bien y Raquel no tanto con su esposo, y añado más, creo que Carrasco se murió estando enamorado de Rocío Jurado. Con eso lo digo todo e igual pienso que la Jurado murió enamorada de su ex marido”, dijo.

Esas palabras le cayeron como un ancla a la viuda de Pedro Carrasco. Para Raquel Mosquera, el amor que existió entre ella y el boxeador fue único. De hecho, a pesar de lo que diga su hijastra Rocío Carrasco y ahora el periodista, el amor que existía entre ellos era tremendo.

En sus redes sociales, Raquel siempre lo tiene presente. Hace poco escribió: “Fue muy fácil quererle, e imposible olvidarle. Vivimos diez años de amor sincero, lleno de complicidad, cariño, respeto y admiración el uno por el otro... demostrándonos, día a día, el amor que nos sentíamos. Por donde íbamos todo el mundo nos decía que éramos el ejemplo de una pareja sana”.

Raquel Mosquera no entiende ese ataque gratuito de Jimmy Giménez Arnau a estas alturas de la vida, después de tantos años y menos cuando el pasado quedó enterrado y ella intenta rehacer su vida con un matrimonio en puertas.

Las cosas de la vida

Hay gente que recuerda que el matrimonio entre Pedro Carrasco y Raquel Mosquera como fuerte y apasionado. Un señor que trabajó cerca de la peluquería hizo amistad con ambos e inmortaliza el amor así entre ellos: “Lo que yo viví con él y con Raquel fue la sensación de que les unía un amor pasional e intenso. Pedro venía todos los días a comer con su mujer, se pasaban el tiempo haciéndose caricias. Se querían muchísimo. Nadie puede decir que él seguía enamorado de Rocío Jurado, porque es mentira. Que le tenía cariño, sí, pero era un sentimiento de amigos”.