LA REALEZA DE LUTO
Los momentos más emotivos del funeral del Duque de Edimburgo, entre invitados y promesas cumplidas
El esposo de la Reina Isabel II fue despedido este sábado 17 de abril.
El pasado 9 de abril, el mundo recibía una triste noticia por parte de la Casa Real Británica: el Duque de Edimburgo falleció a los 99 años, no sin antes tener asegurada su última voluntad, que sería cumplida este sábado 17 de abril en su funeral.
La despedida al Duque de Edimburgo se realizó en la capilla de San Jorge, en el castillo de Windsor, al que solo acudieron 30 personas, quienes fueron seleccionadas por Su Majestad. Entre ellos, los Duques de Cambridge, quienes fueron de los primeros en llegar al lugar.
El Príncipe Carlos, hijo del Duque de Edimburgo, llegó con un semblante serio y triste. También arribó la Duquesa de Cornualles, separada del heredero al trono, y Zara y Mike Tindall. Por su parte, las Princesas Beatriz y Eugenia llegaron un rato antes que la Reina Isabel II, quien acudió vestida de luto y con mascarilla.
El esposo de la Reina Isabel II tenía una última voluntad, que su esposa cumplió sin dudarlo. El Duque de Edimburgo había expresado sus ganas de que su féretro fuera trasladado en un Land Rover, un vehículo militar que él mismo se encargó de diseñar y que fue encargado en el 2003.
Por otra parte, el Duque de Edimburgo pidió explícitamente determinadas insignias para honrar su carrera militar, a la que ha dedicado 13 años tras retirarse de la Marina Real Británica en 1951. En su altar se pudieron observar estos reconocimientos cosidos con hilo transparente sobre nueve cojines y sobre su ataúd.
Por un lado, estaba la bandera de sus orígenes, pues, desde su nacimiento, él obtuvo el título de Príncipe de Grecia y Dinamarca. Esto se debe a que sus distintivos pertenecen a la vida anterior a su matrimonio o a su familia. Estos presentan cuatro partes. El primero, tiene tres leones azules y nueve corazones rojos sobre un lienzo amarillo en representación de Dinamarca. A su derecha, la cruz blanca perteneciente a la bandera de Grecia. Abajo, a la izquierda, cinco franjas blancas y negras verticales que representan a la familia Mountbatten. La última insignia de Felipe de Edimburgo es un castillo negro y rojo, perteneciente a Edimburgo, en donde se convirtió en Rey Consorte luego de renunciar a sus títulos griegos para convertirse en el esposo de la Reina Isabel II.
Los reconocimientos militares permanecieron en el altar de la capilla de San Jorge, en donde, sobre cojines, se pudo observar su bastón de Mariscal de Campo, el rango más alto del Ejército Británico, al que ha rendido su servicio durante gran parte de su vida.
Además, se lucieron distintas medallas y condecoraciones por sus servicios a lo largo de sus 99 años. El Duque de Edimburgo logró obtener 61 condecoraciones y premios de 53 países diferentes, tal como informaron desde Daily Mail.
