La candidata ideal que el Príncipe Carlos rechazó por órdenes de la Reina Isabel

Hoy todos vemos a la familia real con un lente zoom tras la muerte del Duque de Edimburgo. La Reina Isabel es la máxima autoridad, a su vez de ser la Consorte que más ha estado en el puesto en la historia del país.

Lógicamente, muchas anécdotas e historias hay entre esos más de 75 años de reinado y, por supuesto, también involucra a su familia. Ha demostrado tener la capacidad como nadie para gobernar, la Reina Isabel desde siempre quiso asegurar el destino de su país.

Por eso, Isabel II de Inglaterra estuvo al pendiente de quién sería la mujer que acompañaría a Carlos, su primogénito y, por consiguiente, heredero del trono. Muchas candidatas desfilaron delante de sus ojos, pero digamos que solo aprobó a una, la misma que hoy está sentada al lado del Príncipe.

Sin embargo, una candidata proveniente del territorio ruso había puesto su mirada en el Príncipe Carlos. La Reina Isabel tenía sus influencias en dicha región, sobre todo con los antiguos zares de Rusia. Entre esa familia aristócrata se encontrada Olga Romanoff, una prima lejana a la Realeza británica.

Ella parecía ser la candidata perfecta para el Príncipe Carlos, con la excepción de que a la Reina Isabel no le agradaba del todo. Sin embargo, Olga ha confesado en el documental The Queen and Heir Cousins, de la cadena ITV, que ella realmente reunía las condiciones para ser la heredera ideal.

Un título. Casta. Y tenía 17 años y la virginidad era buena ¡Yo era de lo más virginal!

Una cualidad que valía mucho en aquel entonces. Pero hubo un detalle que la Reina de Inglaterra no pudo pasar como inadvertido. Ya que su visita a los zares era esporádica, detectó un detalle en la querida Olga, lo cual fue suficiente para tacharla de la lista de pretendientes:

Al parecer, ellos tenían unos modales perfectos, y yo unos modales terribles.

Esto ha confesado la señorita Romanoff en el mismo audiovisual. Sabemos que la Reina Isabel ha velado desde siempre el destino de la monarquía. Sin embargo, el tiempo se agota y la muerte de su esposo lo ha puesto en evidencia más que nunca. ¿Estará arrepentida de esta decisión?