El dolor de Máxima de Holanda por el "orgullo y prejuicio" que atormenta a la Princesa Amalia

Ser adolescente es uno de los caminos más complejos que atraviesa el ser humano en su proceso de evolución y crecimiento. Cambios físicos, una constante búsqueda entre gustos y colores para definir la personalidad, rebeldía y otros factores definen este intrincado camino. Pero si hay algo que puede empeorar el panorama es, sin duda, que todo esto ocurra frente a los ojos de un país entero y, para la hija mayor de Máxima de Holanda, la Princesa Amalia, este es su peor infierno.

Heredera del trono de los Países Bajos e hija mayor del rey Guillermo y la Reina Máxima de Holanda, Amalia esta llamada a dirigir los destinos del país naranja en el futuro cuando su padre abdique a su favor o fallezca, y a sus 17 años es poco el tiempo que le queda para vivir sus años libres de obligaciones reales. Al cumplir los 18 comienza el verdadero transitar por la vía monárquica.

Amalia de Holanda cuenta con el respaldo de su padre, quién se ve reflejado en ella, y de la gran Máxima de Holanda, ambos están prestos a ayudarle en su camino de formación como futura Reina de los Países Bajos, pero nadie puede prepararla para soportar sin que esto le afecte, las marcadas críticas, burlas y señalamientos que recibe gracias a su imagen corporal, que según sus detractores, dista de los cánones representativos de lo que se supone debe ser una Princesa estilo Disney. Estilizada, cintura pequeña y medidas de muñeca Barbie. ¿Acaso puede haber algo más injusto?

¡Vamos, que apenas tiene 17 años! Según el portal "Mujer Hoy", la horrible campaña de "body shaming" que envuelve a la primogénita de Máxima de Holanda, utiliza adjetivos con carácter peyorativo que rebasan internet y siempre van vinculados a su nombre en cada monitor de búsqueda: "gorda", "fea", "talla grande", y aseveraciones dolorosas que aseguran que su título académico no se lo ha ganado fruto de su esfuerzo sino que es un regalo "por ser quién es".

Desde este medio consultado, se dice que este factor podría ser de carácter genético heredado de Máxima de Holanda, quien también, según ella misma comentó a medios locales, sufrió los mismos estragos cuando tenía su edad. Sin embargo, la Soberana nunca tuvo que soportar el bullying incluso en algunos programas de televisión que se han hecho eco de esta triste realidad.

Pero si algo ha enardecido a las audiencias es el conocer el sueldo que Amalia de Holanda percibirá al cumplir los 18 años cuando deba ejercer funciones oficiales y representativas en favor de la casa Orange Nassau. Se estima que la heredera recibirá un ingreso anual de 1.6 millones de euros.

Si bien Amalia, como la heredera de Guillermo y Máxima de Holanda, ha protagonizado algunos actos y eventos de carácter protocolar desde que cumplió los 15 años, su perfil es demasiado bajo siquiera para contemplar una "mesada" de estas proporciones. Esta información generó un escándalo tal en ese país, que los parlamentarios de la oposición exigieron una revisión de los fondos que conforman las arcas reales y que sea la División de Asesoramiento del Consejo de Estado de los Países Bajos quién justifique al país semejante decisión.

Mientras una parte significativa del Parlamento quiere saber en qué se justifica más de un millón de euros y si la representación de la hija de los reyes vale todo esto, lo cierto es que poco o nada se conoce sobre cómo la vástaga de Máxima de Holanda es guiada en su camino a convertirse en la futura Reina de este país. Sí creíamos que con la Princesa Leonor, la opacidad mediática era impenetrable, con Amalia de Holanda ya esto es oscurantismo medieval.

Lo alarmante de toda la situación es que la misma heredera ha expresado que, en ocasiones, se le hace difícil visualizarse como la próxima Monarca, mientras que Máxima de Holanda afirmó en medio de una entrevista concedida a propósito de su 50 cumpleaños, que no veía a su hija como Reina sino como "su bebé". ¿Todo bien en casa?

Ante las dudas del país sobre el futuro de la Princesa Amalia, la estrategia que los reyes Guillermo y Máxima de Holanda han encontrado es que se tome un año sabático para viajar alrededor del mundo con la intención de empaparse de otras culturas y sensibilizarse ante los dramas humanitarios, pues confían que a su regreso la princesa Amalia pueda hacer frente a las críticas, los señalamientos y las dudas con mayor sentido de madurez y responsabilidad ante el deber. Si esto da o no resultado solo el tiempo lo dirá.