En un año de muchos cambios e incertidumbre alrededor de la tan querida Concha Velasco. Su hijo Manuel tuvo que mantenerse de pie pese a la cantidad de críticas recibidas por las decisiones que impactaron sobre la imagen de la actriz, entre ellas vivir internada en una residencia de cuidados especiales. 

El cariño de una de las artistas más multifacéticas de España nunca será cuestionable, a diferencia de los movimientos de su hijo mayor, Manuel Velasco, responsable de la internación de Concha Velasco en una residencia especial, así como de las últimas restricciones en relación a las visitas recibidas por la actriz. 

Por todo este año fueron muy sonadas las visitas de celebridades del espectáculo local que se acercaron hasta Orpea Punta Galea, el centro médico en el que Concha Velasco pasa sus días a la sombra de sus 83 años, sin proyectos artísticos ni la menor esperanza de volver a los escenarios. 

La que en otrora deslumbraba en todos los formatos, hoy es atendida las 24 horas por personal especializado que vigila de cerca la salud de Concha, quien entregó por completo su voz a la de Manuel, único vocero oficial de su estado frente a la prensa. El hijo mayor que jamás imaginó salir de su anonimato para dar el parte médico de su madre cada vez que se lo piden, ha dicho muy poco de cómo es el día a día de su madre, un motivo por el que ha recibido muchas críticas debido a la magnitud del personaje de Concha Velasco en los medios españoles. 

Manuel y Paco, el segundo hijo de la actriz, se han hecho responsables de la salud de la querida Concha y han informado con mucho hermetismo sobre sus avances. Una razón para que personalidades de la prensa decidieran ir ellos mismos a ver con sus ojos a la actriz. De aquello se filtraron fotografías que circularon en redes y que mostraban a la actriz en silla de ruedas o en una actitud muy diferente a la de sus años más dorados. 

Fue hace unos meses cuando, por decisión de Manuel Velasco, las visitas se acabaron con unas declaraciones que alertaban más que inspirar calma. El también actor afirmaba que era lo mejor para su madre, ya que cada vez necesitaba de más cuidados diarios. 

Pero ¿por qué Concha Velasco confía tanto en su hijo? 

Manuel tiene 46 años y comparte el oficio de su madre. Director de cine y teatro, actor y fotógrafo, el hijo mayor de Concha Velasco conoce con exactitud el ambiente que se maneja en los medios, aunque él no disfrute de estar frente a cámaras, domina perfectamente la escena y estaría preparado ante el peor escenario. Eso desde ya es un motivo de sobra para que la actriz confié a ciegas en él. 

En el entorno familiar, el primer hijo de la actriz creció junto a Paco, el segundo retoño fruto de su matrimonio con Pacó Marsó, con quien Manuel creció sin ninguna diferencia, ya que entendía que su padre es Fernando Arribas. Esto no impidió que creciera y fuera el referente directo de su hermano, figura de relevo frente a las peores situaciones. Eso también lo sabe Concha y lo respeta por la buena salud en el círculo más interno de su familia. 

Por otro lado, Manuel Velasco conoce el amor de su madre por las artes y la profesión que por décadas la hizo brillar delante de las cámaras y sobre las tablas. Una pasión que ambos comparten y que los unió más allá del abrazo de madre e hijo, pues Concha Velasco protagonizó la obra "El funeral" dirigida nada más y nada menos que por su hijo, un voto de soberana confianza y complicidad. 

La más respetada de España 

Concha Velasco se inició en el mundo de las artes a la temprana edad de 10 años como bailaora de flamenco en la mítica compañía de Manolo Caracol. Desde entonces, exploró por todas las disciplinas posibles y debutó en el cine a los 15 años con "La reina mora", película que le abrió las puertas a una carrera llena de éxitos con premios tan destacables como el Goya Honorífico recibido en 2012, después de siete décadas de dedicación ininterrumpida a la cultura y las artes españolas.