JESÚS QUINTERO

El “turronero” y un gesto que podría proteger de por vida a Jesús Quintero

El empresario no deja de sorprender con sus gestos.
sábado, 10 de septiembre de 2022 · 11:17

Atrás quedaron los días de fama y gloria para Jesús Quintero, quien será recordado como uno de los periodistas más destacados de la radio y televisión española. La realidad es que el presente de “El loco de la colina” está debilitado por su delicado estado de salud, y en estos momentos de vulnerabilidad la mano amiga de el “Turronero” es imprescindible. 

El periodista nacido en Huelva ingresó hace unas semanas a la residencia geriátrica Nuestra Señora de los Remedios y según el medio La razón, su situación económica impedía que se quedara por mucho tiempo más y es ahí donde la figura de el “Turronero” llega en su rescate para hacerse cargo de todos los gastos y garantizar que no le falte nada en su estadía. 

Para el citado medio, Jesús Quintero estará atravesando un momento de limitaciones económicas que mezclado con su delicado estado de salud, lo mantendrían totalmente despojado de sus habilidades racionales para elegir otra alternativa. El que la residencia de cuidados especializados esté ubicada en Ubrique es una coincidencia que facilita que el periodista sea otro de los protegidos por el empresario gaditano. 

Jesús Quintero. Fuente: (Imagen de Archivo).

Desde que el “Turronero” se enteró del grave estado del periodista no dudó en correr con todos los gastos, sin pedir nada a cambio. Así lo aseguraron vecinos de la localidad que conocen las acciones benéficas del empresario y para quienes es un hombre que “le quiere todo el mundo”. 

José Luís López, el "Turronero". Fuente: (Instagram).

¿Quién es el “Turronero”? 

José Luís López nació en Ubrique, localidad gaditana, en 1963 bajo el seno de una familia muy humilde. Inspirado en cambiar la realidad de su familia, el conocido por todos por el “Turronero” empezó a trabajar duro desde muy pequeño, siempre del lado de la gente humilde, alegre y amistosa, a la que considera su verdadera familia. 

En sus inicios vendió turrones, más tarde serían seguros y luego saltó al mundo inmobiliario, en el que se ha dado a conocer por vender terrenos, naves y edificios, quedándose con solo lo justo. Junto con su esposa, selló la fundación López Mariscal, desde la que ayuda a distintos colectivos con becas en proyectos culturales, educativas e industriales.

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