Si de algo estuvo plenamente consciente la Reina Letizia durante todo el trascurrir del año 2022, e incluso desde hace bastante tiempo, es que el día de su cumpleaños número 50 iba a ser un acontecimiento muy esperado, que generaría suma atención, con la esperanza de que fuera un año desmarcado de los anteriores y algún evento especial ocurriese. Confirmamos que nada de esto sucedió y, en cambio, la Consorte quiso contar a sus amigos más cercanos -en mayor parte excolegas del oficio de periodista- su mayor deseo para este día. ¿Qué podría pedir entonces una mujer que lo tiene todo? Pues gracias a una reciente publicación de la revista Lecturas, este misterio ha quedado finalmente desvelado.

Quizás para esta celebración, la Reina Letizia haya optado por una reunión privada en su residencia, el Pabellón del Príncipe, solo en compañía de su familia y el grupo de amigos que conforman su primer anillo cercano. Si la torta de cumpleaños tiene o no edulcorantes o si recibirá algún obsequio es lo de menos, realmente lo que importa es que, finalmente, su única expectativa para este día inevitablemente se cumplió.

La periodista Lucía Yuste lo ha clarificado en RNE y resultó realmente sorprendente conocer el punto de vista de la Monarca al respecto de este día especial. Según lo expuesto, lo único que realmente deseaba es que la fecha pasara lo más pronto posible. ¿Sorprendente? No debería serlo, tomando en cuenta su personalidad, que siempre apunta hacia la mayor discreción.

Tomemos además en cuenta que, para la esposa del Rey Felipe, estos son días de máxima agitación. Hace apenas una semana sobrevino el fallecimiento de la Reina Isabel en Escocia y esta fatalidad obliga por cuestiones de respeto a evitar cualquier tipo de celebraciones, por lo que la esperada fecha marcada en el calendario quedó empañada y, a efectos del proceder de la Reina Letizia, no resultó tan contraproducente, pues de alguna manera, aunque es una noticia lamentable, desvió un tanto la atención de los posibles fastos que protagonizaría para hoy.

Un cumpleaños que pasó debajo de la mesa

Es posible que para sus adentros, hayan incluso otras razones personales que incidieron en la decisión de la Reina Letizia de no realizar ningún tipo de actividad especial por la ocasión. La ausencia de la Princesa Leonor es de todas una muy marcada, dado que la Soberana y sus hijas son muy unidas, y no habría querido organizar algún plan de celebración sin que alguna de ellas no pudiera estar presente.

Pero también subyacen las presiones propias de la expectativa fundamentada desde los medios. Ante ello no ha cedido, pero sí que entiende cuán decepcionante podría resultar para muchas personas. Sin embargo, no es algo que la Reina Letizia pueda evitar y prefiere mantenerse completamente ajena. En días difíciles y tiempos de austeridad institucional, cualquiera de estas tentaciones tendría sentido para cualquier otra monarquía, pero en esta, es un tema debidamente internalizado. Sin algarabías, sin escándalos, solo trabajo.