Jorge Javier Vázquez confirma lo que muchos suponían sobre su salud y su corazón

Jorge Javier Vázquez tuvo consecuencias inesperadas en sus vacaciones por Perú. El mal de altura le afectó y le provocó un edema pulmonar. Sin embargo, el presentador no se amilanó y desde el primer momento calmó las aguas. Hasta él mismo se ha burlado de su situación con algunos memes por sus redes sociales.

El periodista pasó dos días en cámara hiperbárica con corticoides y antibióticos. Los síntomas los presentó apenas aterrizó en Cusco. Los síntomas se presentaron en la segunda noche. Despertó y le costaba caminar. Se metió en la cama y el cansancio fue tremendo. Eran las cuatro de la tarde y todavía permanecía acostado con mucha debilidad hasta que llamaron al médico. Al hospital llegó desestabilizado y le colocaron los pinchazos.

En ningún momento, Jorge Javier Vázquez desistió de continuar el viaje. Estuvo en Machu Pichu con su botella de oxígeno y no perdió el humor. Desdramatizó la situación y no se amargó.

Hace poco, el presentador en su columna “Vidas propias”, publicada en la revista Lecturas, escribió: “Qué país tan hermoso Perú, tan inquietante. Qué sensaciones tan especiales se viven en lugares con esas energías únicas que tienen Machu Picchu o las líneas de Nazca. Sí. Pasé el mal de altura. Sí. Se me complicó con un edema pulmonar. Pero el país es tan majestuoso que se lo permites todo”.

Luego continuó: “Una gastronomía exquisita, unos paisajes espectaculares y una gente amabilísima. Es todo tan extraordinario que necesitas llegar a casa y reposar la mente para ordenar tanta belleza apabullante. Tras visitarlo entiendo más que nunca la expresión ‘valer un Perú’”.

Es todo tan extraordinario que necesitas llegar a casa y reposar la mente para ordenar tanta belleza apabullante.

Los memes de Jorge Javier

La Covid no pudo con Jorge Javier Vázquez. La pasó mal esos días. Y aún así estuvo con buen humor. Estando en Perú bromeó: “He pensado mucho estos días. Si la palmo y están en el cargo ese día Ayuso y Almeida, les doy libre ese día. Pero que venga a cantarme al oído embalsamado Paloma San Basilio La Hiedra”.