La decisión del Rey Juan Carlos que crispa los nervios de la Reina Letizia

La visita del Rey Juan Carlos mantuvo en vilo a la Zarzuela durante toda la semana pasada y, sobre el final, hubo una decisión inesperada que crispó los nervios de la Reina Letizia y no le sentó nada bien al Rey Felipe.

Sin la posibilidad de navegar los últimos días debido a las condiciones climáticas en la costa de Sanxenxo, el Rey Juan Carlos adelantó su salida de tierras gallegas, a donde había llegado el miércoles, para probar suerte con Bribón.

Después de algunas horas de entrenamiento, el Emérito desistió de competir y, con el chalet de su amigo Pedro Campos como base, dejó el Club Náutico para recoger sus maletas y dirigirse al aeropuerto de Vigo.

En un vuelo privado, y sin anunciarlo, aparentemente, a la Zarzuela, el Rey Juan Carlos se fue hasta Vitoria, algo que encendió las alarmas. ¿Fue para encontrarse con Iñaki Urdangarin? 

Sin dudas, de haberse confirmado ese rumor hubiese sido un escándalo político inconmensurable. Pero no, el Rey Juan Carlos no fue hasta el País Vasco para reunirse con el futuro exmarido de la Infanta Cristina, sino mantener una consulta, teóricamente, con un traumatólogo. 

De todas maneras, la extensión del recorrido, más de lo previsto, no cayó nada bien en la Reina Letizia y el Rey Felipe, que sienten escalofríos cuando el Rey Juan Carlos pisa suelo español. 

Las diferentes dolencias físicas, a los 85 años, han disminuido hace tiempo las capacidades de movilidad para el exMonarca, que desde hace bastante que, además de un bastón, necesita de un acompañante para poder mantener la estabilidad.

Eso quedó plasmado en cada uno de los movimientos del Rey Juan Carlos durante el tiempo que transcurrió en el Club Náutico de Sanxenxo, en donde fue asistido, en todo momento, por dos de sus colaboradores.

Así terminó la visita del Rey Juan Carlos al país, después de 11 meses, y que promete ser la primera del año, ya que manifestó sus deseos de regresar en junio, para poder, al fin, navegar en Bribón. Tampoco se descarta que pueda intentar otro viaje en septiembre, cuando la Princesa Leonor jure la bandera, previo a su ingreso a las academias militares.