La obsesión con la que la Reina Letizia ha criado a sus hijas no ha dejado nada librado al azar y se ha enfocado, en todos estos años, en la educación y en la alimentación de la Princesa Leonor y de la Infanta Sofía, tanto que ni la distancia las puede librar de las instrucciones de su madre.

Para la Reina Letizia una dieta balanceada y nutritiva repercute no solo en la imagen sino también en la salud, algo de lo que ella ha dado sobradas muestras, sobre todo con sus cambios físicos sufridos durante los últimos años. 

A todos aquellos que se han ufanado de ella por su supuesta extrema delgadez les ha enrostrado una figura tonificada y una musculatura envidiable para cualquier mujer que ya curse los 50 años, como sucede con Doña Letizia. Es que tanto sacrificio no ha sido en vano.

Si bien se sabe poco y nada de la vida privada de las hijas del Rey Felipe y de la Reina Letizia, sí es un hecho que, cuando se enteró que en el colegio Santa María de los Rosales no había un menú saludable, allí estuvo la Consorte para hacer algunas sugerencias, que se escucharon como si se tratase de un miembro de la Realeza. Claro, ¿cómo negarse?

Algo similar ocurrió cuando la Princesa Leonor decidió que estudiaría el bachillerato internacional en la UWC Atlantic College de Gales, hasta donde llegaron los pedidos de la Reina Letizia, para que la heredera del trono no tuviese distracciones alimenticias, a pesar de estar lejos de casa. 

La Infanta Sofía, una vida saludable y aferrada a los deportes

Ahora le llegará el turno a la más pequeña de las Borbón y Ortiz, que dentro de dos meses será la que armará las maletas para continuar en el internado Gales, siguiendo los pasos de su hermana mayor. 

Lo que no se imaginó la Infanta de España es que hasta el castillo de St. Donast también cuentan con un menú saludable, que contó con el asesoramiento de su madre, que está atenta a cualquier tentación que puedan tener las adolescentes. 

Si bien la Infanta Sofía siempre se mostró saludable y afín a la práctica de deportes, como por ejemplo el fútbol, durante los dos años que pasará en Cardiff tampoco tendrá espacios para desbarajustes, porque aunque podría pensarse que se libraría de su madre, está claro que no. Eso no sucederá ni estando a miles de kilómetros de Zarzuela.